El miedo no se guarda en la gaveta

Como mamá de tres niños y uno con necesidades especiales (no verbal)- diagnosticado con autismo y ADHD- el miedo ha sido mi mejor aliado. Así que la idea de desarrollar mi negocio nace de: “No puedo dejar los nenes con nadie porque el grande no me habla todavía y los otros dos son muy pequeñitos”.

Mi conciencia, repetidamente, me preguntaba: “Si les pasa algo, si les hacen daño, ¿cómo lo vas a saber”? Porque, aunque sea muy triste, hay demasiados corazones fríos que disimulan bastante bien.

Me refiero al miedo como mi mejor aliado porque en lugar de tomarlo como una excusa para no atreverme a salir de mi zona de confort ha sido y es una inspiración. Desde entonces, ando dándole vida a lo que es Minelys Pabón. Comencé haciendo un montón de disparates, ahora me causan una risa un poco difícil de controlar (si me escucha mi abuela, me diría que estoy pava), pero esas experiencias valen oro.

Aprendes a que por más necesidad que tengas no debes vender accesorios de Wish (y de esto me voy a reír toda la vida) y que SHEIN no es un suplidor de ropa, sino una tienda en línea en la que todo el mundo puede hacer sus compras.

En el camino hay miles de tropiezos, uno llora porque te puedes sentir inconforme con lo que estás haciendo o te deprimes porque te das cuenta de que hay 65 negocios muy similares al tuyo o hasta con los mismos productos. Entonces, te das cuenta de que tienes que ponerte unas vendas en los ojos, trabajar de la mano de Dios y dejar que él te guíe porque, de no ser así, no lo lograrás (aunque tengas un propósito precioso, eso no es suficiente).

Ser emprendedor tiene sus retos y son muchísimos, pero, cuando pones toda tu confianza en Dios, todo cae por añadidura. Es impresionante todo lo que he podido lograr en un año, mis mayores enseñanzas han sido la paciencia y la perseverancia. Al menos, mi razón y propósito son tan grandes que van de la mano de Dios, y, aunque llore día y noche del cansancio o la frustración, no me permito rendirme. Hay mujeres que necesitan ayuda, hay niños que necesitan ayuda, y ellos son mi propósito y yo voy por ellos.